Samborondón.- En la casa donde ocurrió el doble crimen habitaban tres mujeres y una de ellas sobrevivió. Las víctimas estaban amordazadas y sus pies y manos atados con cinta.
Una joven, de 30 años, quedó viva en la misma casa, donde la madrugada de este miércoles 26 de septiembre mataron a su madre, Olga Cruz Fuentes, y a su hermana, Stefanía Egas Cruz.
Las víctimas de 68 y 26 años, respectivamente, estaban sin vida en un domicilio de la urbanización Las Riberas, en la parroquia satélite La Puntilla, en la avenida Samborondón, en el cantón del mismo nombre.
Los cuerpos se encontraban en diferentes habitaciones, cada uno sobre sus camas, amordazados y con las manos y pies atados con cinta de embalaje. Las puertas del domicilio no estaban forzadas, pero había un acceso posterior por el que presumiblemente ingresaron los atacantes.
Francisco Hernández, jefe de la Dirección de Delitos Contra la Vida de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), informó que a simple vista no había heridas, como cortaduras. Sin embargo, explicó que la asfixia mecánica por estrangulamiento no deja huellas visibles y que las causas de las muertes se determinarán tras la autopsia médico legal. El oficial agregó que la sobreviviente presentaba un leve golpe en la cabeza y que fue atendida en el sitio por personal médico.
“La joven está fuera de peligro. Está en shock por lo ocurrido, pero ha dado información que será corroborada en las investigaciones. Por ahora, dijo que entraron hombres desconocidos a rebuscar en la casa”.
Además, descartó que ella tuviera algún problema mental como se rumoreaba. Hernández indicó que a las 06:00 se conoció del hecho, aunque -según videos de las cámaras de seguridad- los atacantes ingresaron aproximadamente a las 02:30.
La sobreviviente del hecho, quien dijo que también estuvo amarrada y amordazada, alertó a un guardia de seguridad de la urbanización. Fue ahí cuando se informó a la Policía de lo ocurrido. “El desorden en la casa nos lleva a pensar en la hipótesis de un posible robo, sin embargo hay elementos que nos llevan a otra arista investigativa de la que por ahora no podemos dar detalles.
Esa información se maneja con reserva”, enfatizó Hernández. En la casa había desorden, pero no se determinó si se llevaron algo. Por esa razón no se aseguró que el robo sea el móvil del asesinato. “Investigamos la presencia de personas extrañas, pero por el beneficio de la investigación no puedo decir más”, sostuvo el oficial.
Un vecino, que prefirió omitir su nombre, comentó que uno de los residentes mostró un video en el que se observa a cuatro extraños caminando en dirección a la casa de las víctimas. Él comentó que la vivienda donde ocurrió el crimen está cerca del cerco perimetral, el cual colinda con un colegio por el que pudieron ingresar los asesinos.
Álex Vizueta, quien salió de la ciudadela, manifestó que en el sector había mucha conmoción, que los comentarios eran diversos. “A los residentes les receptaron también testimonios, si escucharon o vieron algo extraño. La casa estaba rodeada de policías y con la cinta amarilla de no pasar”.
Estadísticas
De acuerdo con estadísticas de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida (Dinased), del 1 de enero al 25 de septiembre, en Guayaquil, Durán y Samborondón se reportaron 150 muertes violentas. El mismo número del año anterior. En Ecuador, en el mismo período se contabilizan 733 eventos, mientras que el año pasado en estas fechas habían ocurrido 742 hechos.
Fuente: El Telégrafo