Marvin, de 15 años, estaba en la lista de menores desaparecidos desde el 2017, hasta que el viernes pasado fue encontrado escondido en un armario mientras la policía registraba la casa de un hombre de 44 años sospechoso de distribuir pornografía infantil. La prensa alemana calificó este evento como el “Milagro de Adviento” por impactante del caso.
Marvin fue visto por última vez en junio del 2017, se despidió de los cuidadores de un refugio para jóvenes en la ciudad occidental de Recklinghausen. La policía aún no aclara cómo el joven llegó a la casa del acusado de abusos. Solo se confirmó por un comunicado de la fuerza pública que los agentes que descubrieron a Marvin “no vieron en ese momento ningún indicio de que estuviera detenido contra su voluntad”.
La madre de Marvin discrepa con esa resolución, comentó que ella se pudo reunir con su hijo y ella duda que el estuviera dentro de esa casa por su voluntad. “El hombre en cuyo lugar lo encontraron debe haberlo manipulado”.
Además la madre confirmó que el joven fue encontrado con la misma ropa de hace 2 años. Su padrastro también cree que el joven no habría estado por voluntad propia dentro de la casa. Según su madre Marvin tenía 13 años y vivía en un hogar de acogida para jóvenes después de la muerte de su padre.
Marvin todavía permanece bajo tratamiento psiquiátrico. Un portavoz de la policía dijo el lunes que la decisión de cuándo Marvin puede volver a casa dependerá de los médicos. En medio de la conmoción, su madre afirmó que sólo quiere celebrar las fiestas con su hijo. “Quiero visitarlo para Navidad, para celebrar un poco con él”, explicó.
El sorprendente caso ha sido comparado con dos impactantes secuestros en Austria: el de Natascha Kampusch, que fue retenida por su secuestrador durante ocho años antes de que lograra escapar en 2006; y el de Elisabeth Fritzl, que fue mantenida en un sótano y violada repetidamente por su padre Josef en un calvario que duró 24 años. (I)