Miles de ejemplares de la lombriz marina de la especie Urechis unicinctus aparecieron en el área de Drakes Beach, al norte de California (Estados Unidos). Por su forma han sido llamados «peces pene». Más allá del hecho curioso, que hayan terminado en esa playa muestra los estragos que les provoca el cambio climático.
Bay Nature publicó fotografías de los ejemplares en la playa y explicó que su presencia en ese lugar podría deberse a una tormenta en el área, que los empujó a ese sector.
Esta lombriz sin dientes, que puede medir hasta 30 centímetros y vivir hasta 25 años, habita bajo el agua, cavando en el barro o la arena. Se alimenta de bacterias, plancton y otras partículas pequeñas, que captura usando una sustancia pegajosa a través de su única extremidad, con forma de espátula.
Expertos de Bay Nature indicaron que no es la primera vez que se registran este tipo de avistamientos y que el calentamiento global amenaza a esta especie porque el fenómeno de El Niño arrastra las capas de arena donde viven y la deja a la intemperie.
Entre sus depredadores están tiburones, rayas, gaviotas, nutrias y el ser humano.
En China y Japón se suele comer a los «peces pene». Es similar a una almeja. En el primer país se conserva seco y se hidrata durante la cocción o antes de freírlo. Mientras, en Japón, suele servirse como sashimi, una preparación fileteada y condimentada con salsa de soja y vinagre, según explica ABC.
También son consumidos como alimento en Corea del Sur. Además se usan como carnada deportiva.
Se cree que funciona como vigorizante sexual y que ayuda a curar dolencias de riñón y columna. (I)