Un total de 1.200 policías y 1.200 militares acompañados de al menos 20 fiscales ingresaron esta madrugada a la parroquia La Merced de Buenos Aires, en la provincia de Imbabura, para retomar el orden y la seguridad en una zona en la que a partir de la explotación minera ilegal y artesanal se estaban generando varios delitos. La operación llega a solo horas de que el presidente de la República, Lenín Moreno, decretara el estado de excepción para el área.
El Ministerio del Interior, mediante un comunicado de prensa, explicó que el ingreso de policías y militares se inició después de las 04:30 de este martes. La acción no solo tendría como objetivo las actividades ilícitas de recursos mineros, sino también la desarticulación de grupor armados irregulares que se habrían desarrollado alrededor del tema minero para sostenerlo como para lucrar del mismo.
Según las autoridades, al menos once delitos paralelos a la minería ilegal habrían sido detectados por operaciones básicas de inteligencia. Entre estos estarían trata de personas, homicidios, explotación sexual y laboral, evasión fiscal, lacado de activos, extorsión, intimidación, entre otros.
En la zona afectada ya existía presencia policial y militar. Desde hace algunos días se realizaron controles en la vía para evitar que ingresen alimentos a la zona y así intentar desincentivar la permanencia de personas que buscan explotar de manera artesanal rocas con mineral.
A más 07:00 de hoy, la ministra del Interior, María Paula Romo, y el ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, convocaron a una rueda de prensa en el Palacio de Carondelet para dar más detalles de la operación conjunta realizada en la parroquia de Buenos Aires. (I)
Fuente: El Universo