Michael Arroyo está en el “ojo del huracán” debido al doping positivo que oficializaron ayer en la Federación Ecuatoriana de Fútbol y que podría derivar en una fuerte sanción.
El jugador no ha dado declaraciones tras la confirmación del dictamen por parte de la Comisión Disciplinaria, pero ya se ha visto una reacción de su parte en las redes sociales.
El jugador ha borrado de su cuenta de Instagram todo el material que lo haya relacionado con BSC y esto ha llamado muchísimo la atención en los hinchas del club.
Esto podría significar una decepción o malestar del jugador con el club, recordemos que Barcelona no solicitó la apertura de la prueba ‘B’ llamada también como “contraprueba”.
Este caso sin dudas seguirá trayendo cola en los próximos días ya que el jugador fue citado a la FEF el próximo 28 de noviembre en horas de la mañana.